Convertirme en suave y fresca arcilla.
Sentirme plena en la firmeza de tus manos.
Tus manos de artesano.
Tu que eres capaz de magnificar las cualidades de todo lo que tocas.
Trabaja en mi.
Haz de mi tu obra.
No sólo arcilla tengo en mis manos, me dijiste.
No sólo siento como un niño jugando mi corazón.
Un simple artista, me dijiste.
¡Eso no existe!
Un artista es alguien que recibe una bendición, un regalo divino y tiene la suficiente fuerza en su espíritu para convertir su don en una obra sublime.
El resultado es el nexo que une la tierra del hombre con la tierra de los Dioses.
Tus manos, tu imaginación, tu don pertenecen al Olimpo.
Llévame contigo a recorrer el sendero de lo sublime.
Secuéstrame sin pedir recompensa.
Hazme entender lo que no se puede explicar.
En tus manos creadoras.
Orgasmos olímpicos.
No sólo arcilla tengo en mis manos, me dijiste.
No sólo siento como un niño jugando mi corazón.
Un simple artista, me dijiste.
¡Eso no existe!
Un artista es alguien que recibe una bendición, un regalo divino y tiene la suficiente fuerza en su espíritu para convertir su don en una obra sublime.
El resultado es el nexo que une la tierra del hombre con la tierra de los Dioses.
Tus manos, tu imaginación, tu don pertenecen al Olimpo.
Llévame contigo a recorrer el sendero de lo sublime.
Secuéstrame sin pedir recompensa.
Hazme entender lo que no se puede explicar.
En tus manos creadoras.
Orgasmos olímpicos.
El sonido de mis gemidos recorren la vía láctea cuando me tocas.
Mi Hefesto de sudor y fuego.
Mi Hefesto de sudor y fuego.
Soy tu Afrodita de piel y gemidos.
Es ahora cuando mis pezones te llaman.
Haz tu magia creadora y conviérteme en sumisa de tu pasión.
Toma tu cincel y golpe a golpe dame razones para retorcerme de placer.
Hagamos de tu taller nuestro templo.
No habrá tiempo, ni amaneceres.
Que nos importan las noches estrelladas porque para nosotros no existe un arriba o un abajo.
Sin salidas, solo una entrada.
El lugar seguro para nuestro yo mas poderoso.
Nuestra entrada es el yo divino, el creador.
Un lugar donde nos convertimos en nuestros deseos
Un lugar donde reconocemos ser creación divina.
Es ahora cuando mis pezones te llaman.
Haz tu magia creadora y conviérteme en sumisa de tu pasión.
Toma tu cincel y golpe a golpe dame razones para retorcerme de placer.
Hagamos de tu taller nuestro templo.
No habrá tiempo, ni amaneceres.
Que nos importan las noches estrelladas porque para nosotros no existe un arriba o un abajo.
Sin salidas, solo una entrada.
El lugar seguro para nuestro yo mas poderoso.
Nuestra entrada es el yo divino, el creador.
Un lugar donde nos convertimos en nuestros deseos
Un lugar donde reconocemos ser creación divina.
